El 25º Festival Internacional de Cine de Lanzarote (FICL) volvió a llenar de emoción, reflexión y aprendizaje el Teatro Víctor Fernández Gopar “El Salinero” con sus ya tradicionales Sesiones Infantiles y Juveniles, que este año contaron con la participación de más de 4.200 niños y niñas de 25 centros educativos de toda la isla.

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Durante seis días, celebrados a comienzos de este mes de abril, los escolares tuvieron la oportunidad de disfrutar de una selección de cortometrajes especialmente diseñados según su edad y nivel educativo, con el objetivo de acercarlos a la narrativa cinematográfica desde una perspectiva crítica y emocional.

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El consejero de Cultura del Cabildo de Lanzarote, Jesús Machín Tavío, destacó la importancia de esta iniciativa como herramienta educativa. “El cine, además de entretenimiento, puede ser una poderosa vía de aprendizaje. Apostamos por el FICL como un espacio donde las nuevas generaciones puedan desarrollar la sensibilidad, el pensamiento crítico y la conciencia social a través de las artes audiovisuales”, afirmó Machín. 

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Las sesiones estuvieron acompañadas por la animación del actor Luís Garrido, que ejerció de maestro de ceremonias guiando al público infantil por las distintas historias, favoreciendo una experiencia cercana, participativa y didáctica. Una actividad que refuerza el compromiso del Festival con la educación audiovisual y la inclusión cultural desde las primeras etapas formativas.